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Nota por Hernán Panessi publicada originalmente em El Planteo. Mais artigos por El Planteo en Strong The One en Español.
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Recién havia terminado a universidade quando Seba “Don Cupón” Rojas respiró hondo y se disse a sí mismo: “No va más”. Le había pegado un bajón, una especie de “depre”: tenía una crise de identidad. Recibido de Deseñador Industrial en la Universidad Diego Portales, uma das mais prestigiadas do Chile, Don Cupón quis dar um vuelco a sua vida e se meteu de lleno a la musica. Sin nunca antes haberse relacionado com ela.
Los zambullones en profundidad son así: o llegás a la orilla como podés, o te acostumbrás a las olas, o te ahogás en el camino. “Doncu”, como le dicen habitualmente, sabia que o seguinte em sua vida seria difícil, mas, também, o que mais daba? Peor debia ser quedarse con la duda.
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E não só se acostumou a las olas, mas –de puro callejear- forjó um caráter, uma identidade sonora junto a Sondelvalle, a banda que armou junto a uns amigos.
Com uma tendência de quilômetros sobre suas espaldas, com passeios em ônibus, praças, bares, ruas e quem sabe onde mais, Sondelvalle se converteu em uma das surpresas da nova cena chilena.
“En la calle aprendizes cómo funciona el arte, lo aprendizes fuerte”dice Doncu en exclusiva para El Planteo.
O ouro da arte
Depois de entrometerse de lleno nesta nova forma de vida, Doncu y Sondelvalle encaram a sinuosa tarea de agarrar un disco. “Puedo decir que ahí me dedico oficialmente à música”, segue.
Assim, com apenas dois anos de ruedo, Sondelvalle se animou a um metro de uma grande gira por Europa. Y, apesar de anunciar os movimentos da indústria e de coquetear com algumas disqueras, decidir seguir pelo caminho da independência.
“Aí entendemos que los ratos onde estamos componiendo son o ouro da arte. En las conversas estão las temáticas. En la vida que llevemos están las cosas para sembrar”.
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Por estes dias, llevan ocho años de girar y girar, de tocar y tocar, de hacerse –en sus palabras- “medianamente conhecidos”.
“Com a banda interpretação completa, nos convertemos em uma empresa. Você aprende empujando. Necesitábamos facturas. Mas, como se faz? Tudo isso foi um processo hermoso, de muito aprendizado”.
A ordem lógica (ou o trabalho enfocado do compositor)
Hasta el momento, Sondelvalle lleva publicou dois discos e um EP. Y, entre seus máximos orgullos, está ganhando um Prêmio Pulsar, um dos mais destacados de seu país, o “Melhor Artista Tropical”.
“Fue en pandemia, no tuvimos alfombra roja”, bromea Doncu.
Por lo demas, fue durante los años pandémicos en los que Doncu aprendeu um segundo oficio: el de diseñador de arte. Una nueva habilidade que termina aplicando ao resto de sua vida.
“Aprendí a desarrollar el ojo, a ordenarlo para poder repetirlo. Y ese ojo lo apliqué a todo. A veces sólo compongo y canalizo. Mas, em um momento, si la musa no llega… desculpe, tenho que seguir trabalhando. Não posso desaparecer muito na droga e na festa porque desaparecidas muito rápido”, conta.
Com esta metodologia, com esta “mirada de diseñador”, se obriga a componer: sabe que –esses processos são su principal trabajo. Y que, indefectiblemente, necesita de algunos passos.
“Compongo con estructura, con orden lógico. Como traigo las palabras a mim. Traigo ideas, ordeno eso, armo estructuras y pongo conceptos en la cabeza hasta que, de repente, consigo armar una canción”.
E sigo: “No es lo mismo llevar un dolorcito y ponerlo en el papel que esos días en los que estás re plano. Cuando entendí lo que era ‘un producto’, cuando me di cuenta qué hacían los directores creativos, cayó la pandemia”.
Que venga lo que tenga que venir
Aprovechando esse ambiente, y ante a falta de shows ao vivo, Doncu montei uma agência de produção e direção de arte. Todos os videoclipes, publicidades e comerciais.
Em paralelo, formó outra banda, DM, junto a um amigo do mundo do hip hop. Ao toque, grave um EP romântico com puras colaboraciones de chicas. Confinados em casa, filmaron “Yera”, com um videoclipe flasherísimo na tônica de “OLA MINA XD” de Ca7riel e Paco Amoroso.
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Além disso, junto a Sondelvalle se la rebuscaron para hacer una grabación hermosísima en el Museo de Ciencia y Tecnología (MUCYTEC) de Santiago. “La plata que ganamos se la dimos al museo”.
“Nunca tengo idea de lo que voy a hacer mañana”confessa.
Con la pandemia en desaparecer, recebeu uma oferta para fazer direção de arte para uma série da Netflix. Dijo “sí” y se encargo do departamento de arte gráfica de Cromossoma 21, uma das grandes apuestas chilenas da plataforma norte-americana. “Nunca supe qué era ‘departamento de arte gráfica’. Por que me meti em esa huevada? Não volví a dormir em meses”, tira en chiste.
Energia positiva e uma mente sana
Con Sondelvalle, su principal proyecto artístico, siguen tocando y, en la actualidad, se está juntando para escrever suas próximas canções. “Nuestra banda tiene una particularidad: escucharnos bien es escucharnos en vivo”.
Y en sus letras no hay garabatos, ni culos, ni tetas. Hay, sim, una buena onda ungida en sonidos de “rap guachaca” y “cumbia reflexiva” (así lo asumen, así se llama, inclusive, uno de sus discos: Rap Guachaca & Cumbia Reflexiva).
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“Eso lo aprendemos en la calle. Cuando cantábamos en la calle, el abuelo se iba si hablábamos de culo y tetas. Aprendimos eso, a traer dinero. No le deseamos mal a alguien, le deseamos el bien. Ese nos daba más dinero. Componer desde esa búsqueda me hizo tener una mirada más positiva”.
Dessa maneira, fueron desenvolvendo um estilo próprio e, também, esses anos de callejeo se tornaram muitos símbolos para o ADN da banda. Fueron años de tocar com Los Pericos, com Damas Gratis, com Cultura Profética. De brindar shows ante 40.000 personas. “Llenamos locais todos los fines de semana”.
Claro que todo este ruido, todo este movimento, lo pone feliz: después de sus conciertos, su público se les acerca a hablar, a tirarle la buenaa reconocerle que sus canciones los ayudaron en tal o cual situación.
O que mais pegó? Una cumbia gordo em casa llamada “Maracuyá com Manga”, que –curiosamente- não é a favorita de Doncu. Sem embargo, fue la que gerou un base de fãssoou muito no rádio e até se converteu na cortina de diferentes programas de futebol.
Don Cupón, uma máquina de ‘hacer y hacer’
Hoje, Doncu se dedica cotidianamente à direção de arte, é juez de batalha de freestyle e, obviamente, le queda mucho combustível como seguir experimentando e buscando aventuras com a música.
Sempre movido, montou uma exposição itinerante sobre a compositora Violeta Parra na Universidade Católica do Chile, foi carregado um documentário sobre a história do hip hop local, gravado junto a Sondelvalle un “Comida para llevar” (um formato novedoso de música e animação criado por artistas venezuelanos), colaborou com diversos artistas chilenos , metió dirección creativa de algunas cápsulas comerciais (como esta gemita para a marca deportiva Fila) y, cerrando la pandemia (“Algunos nos demoramos más que otros”), está voltando a sua vida cotidiana.
“Temos que sacar um disco a como dé lugar. Se nos va a vivir a España nuestro bajista y productor. Hay que sacar un disco antes. Tengo ganas de moveme, también. De llevarme amigos y empezar con nuevas aventuras”.
A geração do porco
Si bien es raro verlo a Doncu rolando un cego, sua vida social é construída em torno da cannabis. “Meu círculo consome mucha erva daninha”, assegura.
Nesse sentido, destaca o trabalho de En Volá, um dos meios de comunicação especializados mais interessantes da América Latina. “Están construindo una industria, una comunidad”.
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¿Y qué mirada tiene sobre el porro? “Encontro que faz parte do cotidiano da minha geração. Não acredito que alguém tenha algum conflito ético ou moral. Yo tengo mis plantitas, las riego y les doy amor. Crecimos en casas onde a maconha está en nuestros patios, en nuestros balcones, en nuestras penas, en nuestras conversaciones”.
“Soy parte de uma geração que está mudando a realidade cannábica”cerra.
Fotos cortesia de Don Cupón.
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